El perro zen: el perro que disfruta con el aburrimiento

Perro túnel bosque

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La luz al final del túnel

¿Sabes esos días en los que todo sale mal?

Pues yo siempre había escuchado a personas hablar de ellos, pero nunca había tenido esa sensación.

Por supuesto que he vivido días en los que ciertas cosas no salen como yo quería o esperaba.

Pero luego ocurrían otras que compensaban.

Hasta el sábado pasado.

Mi pareja y yo tenemos entradas para ir al teatro a las 12 del mediodía (horarios normales cuando tienes un niño de 4 años).

Hace meses que no vamos al teatro, y quizás años que no vemos una obra en sí. No monólogos o representaciones para niños, sino una pieza más «clásica».

Ya salimos de casa tarde (más de lo que deseamos), pensando que llegaremos a las 12 en punto. Vamos en moto. El aparcamiento y el posible tráfico no deberían ser un problema.

Y así es.

Bueno, no del todo.

El teatro está dentro de un edificio muy grande con varios accesos. Y al acercarnos a la puerta a las 12:00, vemos un cartel en una reja que dice que debemos acceder por otra entrada.

Justo la que hay en el lado contrario del edificio.

Corremos y llegamos a la puerta del teatro a las 12:05. Nosotros y otras 4 personas mayores.

Puerta cerrada y un cartel que reza:

«Una vez comenzada la obra, no se permite la entrada de espectadores, pues por la configuración del teatro, eso obligaría a parar la función».

Tras llamar a un número de teléfono que hay en el cartel, sin éxito, decidimos irnos a comer.

La comida bien, sin problema.

Luego cogemos la moto y emprendemos la vuelta a casa.

La aguja de la gasolina está baja, y decidimos parar a repostar.

Llenamos el depósito, pagamos, y nos vamos.

A los 500 metros la moto se para. El motor no funciona.

Analizamos y llegamos a la conclusión de que le he echado gasoil, en lugar de gasolina.

Por primera vez tengo la sensación de que igual habría sido mejor no levantarme de la cama…

Pero siempre hay luz al final del túnel.

Esta misma noche nuestro hijo se queda a dormir con sus abuelos, y decidimos revisar si algo de la oferta de teatro de la ciudad nos motiva.

Nos hemos quedado con el mono.

Acabamos viendo un espectáculo que nos encanta y con el que nos reímos mucho.

Dos días más tarde, tras hablar con la productora de la obra de teatro que nos perdimos el sábado a mediodía, se muestran muy comprensivos y nos dan entradas para este próximo fin de semana.

Prometemos llegar 15 minutos antes.

Teatro vacío

Y tú dirás, ¿y qué tiene que ver todo esto, Carlos, con la Ansiedad por Separación en perros?

Si miramos a la estabilidad emocional de los humanos durante el trabajo con el animal, mucho.

El proceso para solucionar la Ansiedad por Separación de tu perro implica un aprendizaje de gestión emocional por su parte.

Y el aprendizaje animal no es algo lineal.

Tu peludo no es un ordenador que cada día autoaprenda y mejore.

Algunos perros aprenden y avanzan sin mostrar muchas dificultades.

Pero otros tienen altibajos durante el trabajo.

Un día tu perro ya gestiona tranquilo 30 minutos de ausencia, y al día siguiente a los 5 minutos empieza a ponerse nervioso y a entrar en ansiedad.

Ese día tú mism@ entras en frustración.

Hasta te puedes arrepentir de haber hecho el ejercicio… o incluso de haber decidido empezar a trabajar.

PERO, si una cosa nos han enseñado los perros con Ansiedad por Separación durante estos años, es que lo que han aprendido hasta un punto del proceso, no lo olvidan de un día para otro.

Ellos, como nosotros, tienen días que están más sensibles y menos receptivos.

Y eso les afecta en el aprendizaje, y en otras facetas.

Pero también en estos casos hay luz al final del túnel.

Siendo consistentes con el trabajo.

Adaptándonos al nivel que tu perro necesita en cada momento.

Y cuidando de su bienestar, pensando de forma racional, y no tanto emocional.

Todo ello ayuda a los perros a superar los estancamientos o regresiones que puedan encontrarse durante el trabajo.

Si quieres que te ayudemos con tu perro con Ansiedad por Separación, haz click en el botón, rellena el formulario de contacto y te llamaremos para comentar los detalles de tu caso, y cómo te podemos acompañar hacia la resolución del problema:

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