El hecho de quedarse solo es algo antinatural para un perro, que es un animal social.
O al menos lo es que esté sin compañía por decisión nuestra.
Un peludo que no quiere quedarse solo puede rascar la puerta para intentar salir o escapar por el mismo sitio donde sus humanos han abandonado el hogar.
Esto puede ocurrir porque el perro en el momento de la salida de las personas quiera ir con ellos, y se frustre por no hacerlo.
Aunque otras veces ocurre (de hecho la mayoría) porque el animal entra en pánico al haberse quedado sin compañía. En este caso estamos ante un perro con ansiedad por separación.
Puedes ver más información sobre el problema en la página de ansiedad por separación en perros.
Los canes que rascan la puerta por frustración de no poder salir suelen hacerlo únicamente al principio de la ausencia de sus humanos. Luego se resignan y aceptan que están solos.
Los perros con ansiedad por separación suelen mantener este comportamiento durante mucho tiempo de ausencia. A veces de manera ininterrumpida. Otras rascan un rato, descansan o hacen cosas diferentes y luego vuelven a arañar.
También puede ocurrir que un perro rasque la puerta cuando escucha un ruido fuera. Un vecino que pasa por el rellano, el ascensor, alguien que llama al timbre, un perro, etc. Todos estos estímulos pueden inquietar al animal y hacer que arañe la entrada para salir.
De esta forma, si te preguntas por qué tu perro rasca la puerta cuando te vas, lo mejor es que analices todos sus comportamientos para identificar en qué circunstancia se encuentra, y abordar el problema del modo adecuado.
Situaciones que se pueden dar:
Índice
ToggleMi perro rasca la puerta por la noche

¿Qué puerta es?
Si tu perro rasca la puerta de salida de la casa por la noche, es posible que sea porque ha escuchado algo en el exterior y quiere acceder a ello, o quizás tiene necesidades (pis o caca) y desea salir.
En la primera situación es posible que estemos ante un perro con hipersensibilidad a ruidos del exterior. Lo más sencillo en este caso sería gestionar el entorno en el que duerme el animal para que escuche menos ruidos del exterior. A veces un cambio de habitación o cerrar alguna puerta puede ser suficiente, siempre y cuando nos aseguremos de que el perro se encuentra cómodo en esa nueva situación.
Si el peludo tiene necesidades, planifica las salidas del día de tal forma que haga un paseo tarde antes de dormir, para que así pueda aguantar bien hasta el día siguiente.
Si tu perro rasca la puerta de tu habitación por la noche, es posible que no esté cómodo durmiendo lejos de ti, o al menos sin la posibilidad de poder acceder a tu estancia, porque cierras la puerta.
Habría que analizar aquí si podríamos estar hablando de un caso de ansiedad por separación o no. Si quieres realizar una evaluación con nosotros, puedes ver todos los detalles sobre la misma en la página del Método DAPS® y hacer una reserva.
A corto plazo, lo mejor para evitar que rasque la puerta de tu habitación sería que la dejaras abierta, y que pudiera acceder con libertad. Eso no solucionaría un potencial problema de ansiedad por separación, pero sí evitaría que empeorase.
Mi perro araña las puertas

Más arriba hemos analizado y explicado las posibles causas por las que tu perro araña las puertas.
Suele ser un comportamiento asociado a un intento de escape o de acceso a algún recurso importante para el animal.
A veces viene provocado por emociones como la ansiedad por separación. Otras se debe a la frustración de querer algo y no poder alcanzarlo. Y hay ocasiones en las que un estímulo externo (como un ruido) afecta al animal, que empieza a arañar la puerta.
Graba a tu perro durante tus ausencias para ver la intensidad y la duración de este comportamiento, así como otras conductas asociadas que muestre. Esto te servirá para identificar las causas de lo que está ocurriendo, y así planificar el trabajo necesario. Te resultará muy útil la ayuda de un educador canino profesional.
Mi perro rasguña la puerta

Analiza qué puerta es la que tu perro rasguña, y con qué objetivo.
¿Rasguña la puerta porque le has dejado solo, no le gusta e intenta escapar?
¿Lo hace debido a que creía que él también se iba de paseo y no ha sido así, con lo que se frustra y desea salir?
¿O quizás el perro del vecino que tanto odia (o quiere) ha pasado por el rellano, le ha escuchado y se ha activado, intentando salir para verle?
Cada uno de estos posibles motivos derivan por diferentes emocionalidades y se deben trabajar de manera distinta.
Por ello resulta clave, como se ha explicado más arriba, identificar la causa, para planificar el trabajo necesario.
En este vídeo mostramos la evaluación que se realiza durante el Método DAPS® si tu perro rasca la puerta cuando te vas:
¿Es tu caso? Te ayudamos con nuestro Método DAPS®.
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Preguntas frecuentes: perros que rascan la puerta cuando te vas
¿Qué hacer cuando un perro rasca la puerta?
Cuando tu perro rasca la puerta, en ese momento hay poco que puedas hacer, salvo volver a casa para que deje de arañar (hablamos de perros que tienen problemas de gestión de la soledad y sufren ansiedad por separación).
Esto no soluciona la situación, pero al menos hace que no empeore.
A medio-largo plazo lo que sí puedes es ayudar a tu perro para que normalice tus salidas de casa y el hecho de que él se queda solo.
Esto debe hacerse con un trabajo de habituación y de desensibilización sistemática. Con ejercicios progresivos, adaptados para el perro en cada momento.
Esta es la base del Método DAPS®, que es el que aplicamos con cada familia y peludo con este problema, como especialistas en ansiedad por separación canina que somos. Puedes ver todos los detalles en la página del Método DAPS®.
¿Qué significa que tu perro rasque la puerta?
El hecho de que tu perro rasque la puerta suele estar relacionado con emociones como la excitación, la frustración, la ansiedad o el estrés.
Hay algo al otro lado de la barrera que quiere, o a lo que desea acceder, e intenta cruzar, rascándola.
Un perro que tiene ansiedad por separación, por ejemplo, entra en pánico porque se queda solo cada vez que sus humanos salen de casa.
En ese momento los perros con este problema que rascan la puerta lo que están intentando es escaparse para poner fin a esta situación.
Llegan a provocar grandes destrozos en puertas, zócalos, … e incluso pueden autolesionarse, porque se hacen heridas en las patas de tanto rascar.
Si este es tu caso con tu peludo, en CANNMIGOS somos especialistas en ansiedad por separación en perros, y podemos ayudarte.
Reserva una sesión de evaluación con nosotros en la que determinaremos si este es el problema y planificaremos el trabajo a realizar con tu perro. Luego te acompañaremos en todo el proceso de mejora con el Método DAPS®.